Futuros
Infraestructuras Digitales Democráticas y Robustas: un llamamiento a la democratización de la transición digital en Europa
En diciembre de 2022, la Declaración Europea sobre los Derechos y Principios Digitales para la Década Digital fue firmada por el Parlamento Europeo, el Consejo y la Comisión Europea. Esta declaración pone en relieve la reciente necesidad de alternativas a las plataformas comerciales dominantes y las prácticas extractivas que dominan el entorno en línea hoy en día.
Ante ello, 40 organizaciones firmantes representantes de la sociedad civil, queremos reconocer la necesidad de alternativas a las plataformas comerciales dominantes y las prácticas extractivas que prevalecen en el entorno en línea actual.
En el comunicado “Statement on democratic digital infrastructure” hacemos un llamado a la creación de un fondo europeo de infraestructura digital pública que apoye los Espacios Digitales Públicos y democratice la transición digital. Entre los principios que deben cumplir estas alternativas se encuentran: crear valor público, aumentar la soberanía digital de las comunidades y sociedades, adherirse a formas democráticas y colectivas de gobernanza, utilizar estándares abiertos y abrazar la interoperabilidad, basarse en software libre y de código abierto, garantizar la privacidad por defecto y por diseñó, cumplir con las normas de neutralidad de la red de la UE y contribuir a una economía regenerativa.
La creación de este fondo de infraestructura digital pública europea sería un paso importante hacia un programa de políticas para lograr una transición digital justa hacia espacios digitales socialmente orientados y respetuosos con el clima, como son algunas plataformas digitales soberanas que ya existen o están en desarrollo, como Mastodon, PeerTube y ActivityPub.
Platoniq, Goteo y Decidim: Una Sinergia para Construir Infraestructuras Democráticas Robustas
Queremos subrayar la importancia de que el movimiento open esté conectado con los movimientos sociales y la gobernanza democrática local o nacional. A través de esta lente, ya existen plataformas que emergen como infraestructuras democráticas robustas que encarnan estos principios:
Goteo es una plataforma de crowdfunding abierta que financia proyectos de impacto social y ha recaudado más de 18,09 millones de euros desde sus inicios. El modelo de Goteo se basa en un marco de licencias abiertas, que invita a los proyectos a compartir abierta y transparentemente diferentes tipos de resultados, así como tiene por requisito que las iniciativas tengan un impacto positivo a nivel social, democrático y ecológico. Sin embargo, Goteo no es simplemente una plataforma de financiación; es una herramienta de creación de comunidad que toma en cuenta las necesidades financieras de las comunidades. Al permitir a los respaldadores apoyar proyectos no solo con dinero, sino también con talento, habilidades y tiempo, Goteo cultiva una economía circular.
Como ejemplo de proyecto con Huella Democrática tenemos a Iridia, que lleva desde 2016 financiando su Servicio de Atención y Denuncia ante Situaciones de Violencia Institucional a través de la plataforma Goteo. Este proyecto colectivo por los Derechos Humanos ofrece asistencia jurídica y psicosocial a las personas que sufren situaciones de maltrato en el marco del sistema penal catalán, además de llevar a cabo actuaciones de oficio para investigar posibles vulneraciones de derechos. Iridia ha conseguido recaudar 254.652€ con sus 6 campañas de crowdfunding publicadas desde entonces.
Otra de las herramientas que utiliza la Fundación Platoniq es Decidim, una plataforma que ofrece una “democracia participativa de código abierto para ciudades y organizaciones”. Como práctica de “crowdvocacy” (abogacía multitudinaria), Decidim amplifica la democracia al proporcionar a la ciudadanía medios de participación democrática a través de diferentes tipos de plataformas.
Su alcance se extiende a más de 200 ciudades en todo el mundo, convirtiéndola en un ejemplo de una plataforma participativa global y distribuida. Decidim, a pesar de su naturaleza global, también permite prestar particular atención a las diferentes culturas locales de participación. No existe una solución de software “única para todos” que garantice la participación cívica. La gobernanza democrática es lo que garantiza el respeto por los valores sociales y la justicia, y el contrato social necesita ser construido encima del código de software y cualquier infraestructura de licencia legal.
La Comisión Europea ya ha utilizado la plataforma Decidim en procesos como el COFOE, logrando una considerable participación e interacción. Esta plataforma ha sido aprovechada como una herramienta para fomentar la participación ciudadana y construir infraestructuras democráticas sólidas.
Ambas plataformas, Goteo y Decidim, crean valor público, aumentan la soberanía digital de las comunidades y las sociedades, y se adhieren a formas de gobernanza democráticas y colectivas. Están basadas en software libre y de código abierto, garantizan la privacidad por defecto y por diseño, se adhieren a las normas de neutralidad de la red de la UE y contribuyen a una economía regenerativa.
En definitiva, son un testimonio vivo del potencial que tienen las infraestructuras digitales robustas y democráticas para generar cambios significativos en nuestra sociedad. Estas plataformas se encuentran a la vanguardia de un movimiento que pone a las personas y a las comunidades en el centro del cambio digital. Representan un esfuerzo mancomunado para fusionar los principios de democracia, apertura y equidad, no solo en teoría, sino también en prácticas tangibles y significativas.
Al adoptar un enfoque de experiencia de usuario político y aplicar principios de economía social y solidaria, estas plataformas han demostrado cómo la tecnología y el diseño centrado en las personas pueden ser utilizados para habilitar la participación democrática y facilitar la creación de valor social.
Estas plataformas representan un paso significativo hacia los objetivos expresados en la Declaración Europea sobre los Derechos y Principios Digitales para la Década Digital, que busca un espacio digital europeo basado en los valores y derechos fundamentales de la UE, y a medida que avanzamos hacia el futuro, será cada vez más importante continuar invirtiendo en este tipo de infraestructuras digitales.
Necesitamos fortalecer y ampliar estas plataformas, garantizando su accesibilidad y relevancia para una gama aún más amplia de personas y comunidades. Al hacerlo, no solo estaremos promoviendo una transformación digital más justa y equitativa, sino que también estaremos trabajando para realizar la visión de un Internet verdaderamente abierto y democrático. Porque, como bien señala Olivier Schulbaum, co-fundador de Platoniq, necesitamos ser democráticos primero, y luego abiertos, como única forma de garantizar que la transformación digital beneficie a todos los individuos, empresas y a la sociedad en su conjunto.