En profundidad

Asambleas ciudadanas con infantes y jóvenes: una herramienta pedagógica única a favor de la democracia

11/febrero/2025 por Cristian Palazzi

Cristian Palazzi

Director de Incidencia y Movilización Ciudadana

Filósofo en Fundación Platoniq y asesor de campañas de crowdfunding cívico en Goteo.org.

Hipótesis

Únicamente en quince países del mundo los jóvenes de 16 años tienen la posibilidad de ejercer el voto y en ninguno se cuenta con su voz cómo menores, sin embargo son varias las iniciativas que empiezan a proliferar alrededor del globo que intentan sumar la voz de infantes y adolescentes a la arena pública. Su ejemplo muestra como los infantes son expertos cuando hablan de su propia vida, que les gusta participar en decisiones conjuntas y que al hacerlo refuerzan el sentimiento de grupo. ¿Y si nos estamos perdiendo una herramienta clave para los tiempos que corren contra el aislamiento social de algunos colectivos? Como parte de Escuela de Creatividad y Democracia de Platoniq, viajamos a Málaga para asistir a un workshop organizado por CoGlobal y facilitado por Katie Reid y estas son algunas de nuestras conclusiones.

Como veremos en adelante existen algunos casos de estudio que nos pueden servir para esclarecer estas preguntas. Algunos de carácter institucional y muchas otras iniciativas que se están llevando a cabo en colegios e institutos que, sin llegar a este nivel, están ensayando metodologías y llegando a resultados que nos muestran la importancia de trasladar la cultura democrática a los más jóvenes.

Story of me: ¿Por qué creemos que esta cuestión es relevante?

Ágora Infantil, un proyecto desarrollado por CoGlobal en escuelas de más de 60 municipios españoles y en el que han participado más de 4.000 chicas y chicos, arroja unos datos muy interesantes cuando hablamos de participación democrática en la infancia y adolescencia. En concreto: un aumento de la inclusión de entre el 30% y el 60% de aquellos socialmente aislados y menos conectados en el aula, la reducción de interacciones negativas entre el grupo y un refuerzo del sentimiento grupal.

Ya en 2001 el Comité de los Derechos del Niño opinó que “Los niños no pierden sus derechos humanos por el hecho de cruzar las puertas de la escuela. Así, la educación debe impartirse de forma que respete la dignidad inherente al niño y le permita expresar su opinión libremente (..) y participar en la vida escolar”. Todo ello en conformidad del artículo 12 de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño (UNCRC), que dice:

1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño.
2. Con este fin, se dará en particular al niño la oportunidad de ser escuchado en todo procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño.

Todo ello lleva a reforzarnos en aquello que ya decíamos en nuestra guía Cómo hacer asambleas deliberativas en escuelas e institutos citando uno de los referentes mundiales de la democracia por sorteo en escuelas, como es Democracia en práctica en Bolivia, “la juventud que experimenta una política estudiantil innovadora y atractiva es más propensa a participar en la política como ciudadanía adulta, e incluso puede inventar algún día formas creativas para mejorar la democracia”.

Story of us: Datos objetivos que respaldan la idea

Como señalan Andrea Corres, Gisela Cebrián y Mercè Junyent en su artículo Early adolescents’ visions of the future: towards hopeful and sustainable futures? “comprender las visiones de futuro entre los adolescentes tempranos puede representar un primer paso para encontrar formas creativas y más adecuadas de promover las visiones probables y preferibles del futuro hacia otras esperanzadoras; tener esto en cuenta es el paso más fundamental para construir futuros alternativos y sostenibles. Además, imaginar futuros posibles y esperanzadores se convierte en una acción política y orientada a la justicia, especialmente necesaria en los espacios educativos”. Estas son algunas de las conclusiones del EDUCLIMAD, un proyecto de investigación aplicada que tiene como objetivo concienciar e implicar a los más jóvenes en materia de sostenibilidad, mediante asambleas escolares por el clima en 25 escuelas de Educación Primaria del Camp de Tarragona, donde han participado de forma directa 1.465 alumnas y 61 docentes.

Otro de los proyectos del cual podemos extraer conclusiones es el que lleva a cabo Eurochild con su Consejo Infantil (CCE), un grupo selecto de niños de entre 10 y 18 años, apoyados por miembros de Eurochild de diferentes países de toda Europa, que desempeñan un papel consultivo en relación con las prioridades clave de Eurochild en cuestión de advocacy, gobernanza. Algunas de sus conclusiones principales, después de mantenerlo activo desde 2017, tiene que ver con la agencia que demuestran los jóvenes y menores en materias que les involucran. “No estamos preparados, nos dicen, para escuchar y mucho menos trabajar con niños” y eso que “los niños son expertos de sus propias vidas”. A lo que proponen repensar la participación de jóvenes y menores en términos de triangulación entre menor-facilitador-decision maker superando el modelo menor-adultos.

Uno de los casos de estudio más relevantes que tenemos a mano es el del Parlamento de los Niños de Escocia, que acabó informando a la Asamblea ciudadana sobre el Clima sobre sus puntos de vista. Este ejemplo es particularmente interesante porque rompe la frontera entre menores y adultos otrogando a estos primeros la capacidad de opinar e influir sobre las discusiones que posteriormente se llevaron a cabo en la Asamblea. A esto se le denomina “deliberación en enclaves” y consiste en explorar junto a un determinado grupo de afectados por un determinado problema cual debería ser el planteamiento general de una asamblea, salvando así las dificultades que supone trabajar de forma representativa a la hora de incluir todas las voces diversas implicadas en una misma cuestión.

En 1996, se creó el Parlamento de los Niños en respuesta a una idea de los niños de Edimburgo que participaban en un proyecto internacional «Eco-City». Pensaban que era necesario un espacio donde los niños pudieran compartir sus opiniones e ideas, y que los adultos por los adultos en las decisiones que se toman en Escocia. En todo nuestro trabajo desde entonces, el cambio climático ha seguido siendo una preocupación clave para los niños. 25 años después la emergencia climática ha sido declarada en Escocia.

Tras varias sesiones de trabajo con algo más de 100 niños de 7 a 14 años de toda Escocia procedentes de 10 localidades, que representaban a comunidades urbanas y rurales, una mezcla de grupos de renta y etnia, y con un equilibrio de género, se llegó a varias recomendaciones en materia de comida saludable, usos de la tierra y del mar, estilo de vida, viaje, trabajo y enseñanza. Pueden consultarse las conclusiones aquí.

Un segundo proyecto en el que participó Katie Reid, probablemente la persona con más experiencia en asambleas ciudadanas con infantes y preadolescentes, mentora en People Powered y autora del material Participación de niños y jóvenes en las asambleas sobre el clima para KNOCA, la red europea para compartir buenas prácticas sobre el diseño y la aplicación en asambleas climáticas, es la Asamblea de niños y jóvenes sobre la pérdida de biodiversidad.

Tal fue la repercusión del proyecto que el Ministro de Biodiversidad de Irlanda opinó:

El proceso participativo que diseñaron es, en mi opinión, reproducible en todos los ámbitos de la política pública en los que se solicita la opinión de los niños y los jóvenes. Deberíamos hacer mucho más. Decir que han tenido un impacto en la elaboración de políticas públicas sería quedarse corto.

Son muchas otras las iniciativas dignas de ser analizadas, como la experiencia en colegios Arte mural en ruta democrática de Área Demos, el City Youth Forum de la ciudad de Jihlava en la República Checa o Czech Republic compuesto de alumnos de 10 escuelas elementales o el proyecto Young DiverCities que llega este año a su tercera edición y que cuenta entre sus logros el haber puesto nombre a una plaza de la ciudad de Settimo en Italia.

Pero para acabar es importante referenciar el Future Council U24, un proceso que tuvo lugar durante el 2023 para dar voz a los jóvenes adultos de Suiza en cuestiones políticas, en concreto a 80 residentes suizos de entre 16 y 24 años elegidos por sorteo.

La primera asamblea ciudadana de jóvenes de Suiza trató de responder a la pregunta: ¿qué debe hacer Suiza para mejorar la salud mental de los jóvenes, especialmente en los ámbitos de la educación, el trabajo, el ocio, la familia y los servicios sanitarios? llegando a 18 recomendaciones, siendo las más votadas la creación de un banco de datos nacional sobre salud mental y jóvenes, la expansión del seguro de salud suizo en materia de salud mental y reforzar la cooperación entre cantones para abordar esta problemática.

Story of now: ¿Cómo damos respuesta a esta pregunta?

Como apunta Laura Lundy, profesora de la Queen’s University de Belfast y creadora del modelo Lundy, referente para Naciones Unidas en el trato que deben disfrutar los infantes que participan en una asamblea, “no se puede subestimar la importancia del artículo 12 para la educación”.

Este modelo ofrece una nueva forma de conceptualizar este artículo de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño (UNCRC) centrando la atención de los responsables de la toma de decisiones en cuatro elementos:

• Espacio: Los niños deben tener la oportunidad de expresar su opinión:
• Voz: Se debe facilitar que los niños expresen sus opiniones.
• Audiencia: La opinión debe ser escuchada.
• Influencia: Se debe actuar en consecuencia, según proceda.

Cuando en 2023 publicamos la guía sobre Cómo hacer asambleas deliberativas en escuelas e institutos en Platoniq ya consideramos que la participación estudiantil sirve para innovar en las formas de democracia y ofrecer iguales oportunidades al estudiantado que quiera participar, independientemente de su etnia, origen socioeconómico, nivel educativo o cultural, nivel de popularidad, carisma, o ambición.

Aplicar metodologías deliberativas entre los más jóvenes permite mostrar los valores de la democracia, acostumbrarlos a participar de decisiones en grupo y comprender el sentido y valor de nuestras instituciones. ¿Te sumas a la ola deliberativa?

Recursos

Democracia en práctica, Elección por sorteo del Gobierno Estudiantil

Katie Reid, Children and Young People’s Participation in Climate Assemblies, KNOCA.

Toolkit del Parlamento de infantes de Escocia

UNICEF, 20 asambleas para escuelas de primaria

Platoniq, Como hacer asambleas deliberativas en escuelas e institutos

Laura Lundy, Model of child participation

URV, Methodological guide - School Climate Assemblies de Educlima

UNICEF. Our Future Pledge: An agenda for futures by youth. A toolkit and global campaign for youth foresight