Solía decir mi bisabuela: “A fuego y a boda va la aldea toda”. Nunca supe si se refería a que con la chimenea encendida en invierno siempre venía alguna visita a calentarse a casa… o que ante un incendio se activaba la solidaridad comunal para extinguirlo. Quiero creer que se refería a ambas situaciones, pues bien gallega era. De todas ellas hablaremos en este artículo.
Es tan sorprendente como desconcertante reincidir en un error cuando creemos conocer la causa, así que tener que lamentar cada verano como las llamas devoran bosques, campos de cultivo y casas es realmente triste. Como bien nos recuerda la Fundación Pau Costa, el fuego es un fenómeno presente en la naturaleza y, de forma controlada, es una herramienta. Lo usamos para cocinar, calentarnos, fabricar herramientas… ¿Qué está ocurriendo en nuestros bosques para que un elemento que antes era nuestro aliado ahora sea nuestro enemigo? ¿En qué momento hemos pasado de utilizar el fuego a nuestro favor a tener que protegernos del fuego?
En la redacción de Fundación Goteo lo estuvimos hablando y definimos tres conceptos (fuego, incendio y pueblo). Quisimos comprender su relación y decidimos contactar con quien pudiera explicarnos. Creyentes hasta la médula en el apoyo mutuo, tiramos de agenda y pedimos ayuda a tres colectivos que hubieran hecho campaña en nuestra plataforma: Civio, Rebrotem y Proxecto Batefogo.
Todos ellos respondieron afirmativamente, dándonos una alegría, renovando nuestra fe en la comunidad y haciendo posible el artículo que vais a leer. Esperemos os parezca igual de interesante y revelador.
La extinción de un incendio es la respuesta, pero no la solución
Casi siempre, una sola cuestión despierta varias preguntas y estas tienen múltiples respuestas. Si en este caso el incendio es la pregunta, podríamos presentar cada uno de estos colectivos a través de la cuestión que plantearon y la respuesta que se dieron.
Fundación Ciudadana Civio, la organización independiente y sin ánimo de lucro que vigila a los poderes públicos, informa a todos los ciudadanos y presiona para lograr una transparencia real y eficaz en las instituciones, se preguntó: ¿son los incendios forestales una lotería inevitable? A lo que respondieron con la creación de la web: España en Llamas donde puedes ver en un mapa los incendios forestales de 100 hectáreas o más ocurridos entre 2001 y 2015, así como una selección de breves noticias destacadas.
Con esos datos llevan años investigando y tratando de responder:
- Quiénes son los culpables de los incendios y qué ocurre con ellos
- Cuánto se gasta en prevención o extinción
- Si los montes españoles están cuidados o si su mal estado ayuda a propagar las llamas
- Si el fuego se utiliza ilegalmente para recalificar el terreno
- Si se cumple la ley para prevenir incendios
Editorial Catro Ventos y Proxecto Batego cuestionaron: ¿hay algún sesgo de género en las decisiones y tareas llevadas para la extinción de incendios? Para responder, decidieron editar y saca a la luz “Árbores que non arden. As mulleres na prevención de incendios forestais”, una publicación colectiva que reúne experiencias de activismo, trabajo diario y recursos didácticos así como ilustración y poesía para dar a conocer el papel decisivo de las mujeres en la prevención de incendios y la gestión de montes en el territorio de Galicia y Portugal.
Finalmente, Rebrotem interpeló a toda la sociedad: ¿cómo podemos responder efectivamente desde la solidaridad ante un incendio que arrebata a las familias su hogar, entorno y medio de sustento? e inició una campaña para dar respuesta económica inmediata a las víctimas y afrontar importantes objetivos a corto y medio plazo como son:
- Reposición de mangueras de riego y canalizaciones
- Recuperación de terrenos agrícolas y su actividad de forma urgente
- Reducción del impacto para los payeses y ganaderos que viven de sus explotaciones
- Reforestación de la zona quemada
- Divulgación de modelos de vida rural, así como de sostenibilidad, gestión del territorio o equilibrio territorial
El Encuentro
Hechas las presentaciones, Javier, Miguel y Roger se dieron cita en videoconferencia para contar su experiencia y saber más de los otros proyectos. Algunas aportaciones interesantes son las que podréis leer aquí, así como escucharles en corte seleccionados.
Javier (Civio): De los 525 municipios en toda España con zonas declaradas de alto riesgo de incendios, sólo 61 disponen de planes de prevención. En muchos casos son municipios pequeños con mucha masa forestal y no disponen de recursos económicos para llevar a cabo el plan. Muchas veces no es fácil identificar la propiedad de los terrenos, requisito previo a cualquier intervención en ellos. Existe una descoordinación entre la administración y los agentes rurales, un desconocimiento de las casuísticas y problemáticas de aspectos claves como la despoblación rural, el envejecimiento de la población, la falta de recursos… donde es muy difícil cambiar dinámicas.
Roger (Rebrotem): Muy de acuerdo. En la zona donde vivo (Ribera d’Ebre) hemos visto como la masa forestal se ha duplicado y eso es un problema. La regresión del sector primario es evidente pues se ha perdido mucha de la gente que vivía de la tierra: vino, aceite, fruta dulce… se pagan a precios insuficientes por parte de las grandes distribuidoras y no es posible competir con el producto de importación, que se consigue a un precio más barato, siendo más interesante para los márgenes de ganancia de grandes superfícies de alimentación. El cambio climático actual agrava la situación: clima seco, altas temperaturas y fuertes vientos son capaces de romper la barrera de la atmosfera, provocando una “lluvia de fuego” que lo arrasa todo.
Todos estos factores (clima, despoblación y falta de planes de prevención) son fatales. Aquí, en Cataluña, el incendio en Ribera d’Ebre ha llevado la gestión forestal al debate político nacional. A nivel social podemos hacer más y ya se están formando ADF (Asociaciones de Defensa Forestal). En Rebrotem estamos viendo eso, que era el momento de hacer el llamamiento a la ciudadanía para activar la solidaridad y la conciencia sobre esta problemática. Fue así como nos pusimos en contacto con Fundación Goteo para iniciar la campaña de crowdfunding y conseguir cofinanciar con la plataforma solidaria esa recuperación, estableciendo un mínimo de 50.000€ y un óptimo de 250.000€ (en la fecha de redacción de este artículo llevaban 84.372€ recaudados). El objetivo a largo plazo es que administración y población recuperen esa vinculación de la que hablaba Javier.
Miguel (Proxecto Batefogo): Bien, nuestro proyecto nace de la iniciativa conjunta de varias personas que trabajamos en el ámbito de la educación social. La falta de un aparato administrativo y la falta de recursos nos indicaba que habí que hacer algo y nos pusimos a ello. Cuando empezamos a investigar descubrimos que la mayor parte del presupuesto para combatir esta situación iba a parar a la limpieza de masa forestal y no había practicamente nada destinado a sensibilización ambiental, y lo que había estaba destinado a públicos que, por lo menos que nosotros sabemos, poco tiene que ver con los incendios. Hacer charlas en colegios e institutos está bien, pero quizás una criatura de ocho años no es la principal responsable de los grandes incendios, por lo menos aquí en Galicia.
Así fuimos recopilando experiencias pedagógicas, no sólo del estado español sino de otros territorios. Partíamos de dos premisas: una, que los incendios, más allá de cuestiones medioambientales o técnicas, son fundamentalmente un reflejo de un problema social (que no sea rentable la explotación por parte de una productora o productor) y dos, que es un problema complejo al que hasta ahora sólo se le proponían soluciones simples. Inmediatamente, cuando se habla en Galicia de los incendios, se habla de los pirómanos, los terroristas, las conspiraciones o, por la otra parte, se habla de los eucliptus y de la ordenación del territorio.
Por eso en Proxecto Batefogo se propone trabajar estrategias de intervención completas. Por ello empezamos a dialogar con ayuntamientos y ahí vimos, como bien dice Roger, hasta que punto un documento estratégico de prevención se convierte en papel mojado cuando no se traslada a la realidad. Conocemos el caso de como ese plan de prevención era un modelo de “copia y pega” que se iba adoptando para cumplir con la ley y que realmente no tenía ninguna utilidad.
Fue a través de nuestra metodología de trabajo, en la que creamos espacios de diálogo vecinales donde vimos que una de las principales peticiones era hablar con la gente del distrito forestal: había una falta total de comunicación con la población y las personas encargadas de prevención, extinción y permisos de quema controlada. Eso nos llamó mucho la atención y puso foco ahí donde estaba el problema.
Fuimos descubriendo que la gestión del monte, tanto en el ámbito de la madera como a nivel ganadero, estaba protagonizado claramente por hombres, mientras que el ámbito de la prevención era llevado a cabo por mujeres. Fue por ello que lanzamos campaña en Goteo, para visibilizar el papel de las mujeres en el ámbito de la prevención. A medida que avanzábamos, vimos claramente que eran ellas las que lideraban las iniciativas a nivel comunitario. Hacían un papel muy importante, e intersante desde la perspectiva de la innovación social, en lo que es la cohesión de las comunidades y su capacidad de respuesta ante un incendio, o cualquier otra agresión que pueda recibir esa comunidad. Viendo que esa situación era recurrente, decidimos investigar si había algo de bibliografía o reflexión, aunque fuera en clave teórica, sobre esta relación entre género y prevención de incendios. Para nuestra sorpresa, no había absolutamente nada.
De ahí surge abrir un espacio de debate y contactamos con una serie de autoras, que no trabajaban específicamente esa área de prevención, pero sí una reflexión hecha en clave de género en ámbito dispares, pero muy relacionados. Esas reflexiones quedan plasmadas en el libro “Árbores que non arden” editado por Catro Ventos, que se cofinancia a través de la plataforma de Goteo.
Conclusiones
Para terminar con nuestra aportación, queremos subrayar uno de los factores que consideramos clave en esta situación: en esta #EspañaVaciada necesitamos estrategias institucionales con participación de todos los actores involucrados que permita revertir la tendencia actual, hay un patrimonio humano y cultural que es necesario proteger, para que la cada cual viva donde quiera y no se tenga que marchar de allí donde quiere quedarse a vivir.
Sabemos que el problema de la España vaciada no es nuevo y se remonta varias décadas atrás. Aquí el objetivo no sólo es que forme parte de la agenda política sino poner en mrcha una estrategia común frente al reto demográfico en favor del medio rural
He ahí dos de nuestras misiones como fundación, el apoyo a toda iniciativa que genere y fortalezca la Huella Democrática que permite la toma de decisión de la ciudadanía en los aspectos que afectan al común; y el cuidado de nuestro entorno, de nuestro medio ambiente, fomentando dinámicas que permitan favorecer una Huella Ecológica positiva y sostenible para el planeta.
Como vemos, con las dinámicas actuales, se atajan las consecuencias y se obvia a las gentes que saben como prevenir la situación. Conocimientos ancestrales que se transmitían de generación en generación, creando una economía rural robusta hoy día se invisibilizan. Podemos dar las gracias que surgen colectivos como estos, y muchos otros más, que hacen un gran esfuerzo de concienciación y activismo para revitalizar el monte e impulsar un cambio en positivo sobre el paisaje.
Si ya nos parecieron muy interesantes las actividades que cada uno de estos colectivos llevan a cabo, lo que nos terminó de fascinar fue el intercambio de ideas y pareceres que se produjo a continuación. Es diálogo, que en la redacción llamamos cariñosamente “DiáloGoteo”, está disponible en el siguiente video.
Sin más, nos despedimos, dedicando este artículo a todas esas personas lucháis a diario, y a mi abuela también, para que tengamos la sensibilidad e inteligencia de cooperar, compartir saberes y preservar la vida. Y ya sabes, puedes empezar aportando lo que puedas a sus campañas a través de Goteo.org